A medida que avanzamos hacia un mundo corporativo más transparente, se ha observado un cambio significativo en el uso de los vehículos legales en las diferentes jurisdicciones. Anteriormente, era común encontrar estructuras complejas con varios niveles de compañías o compañías con acciones al portador, lo que dificultaba la identificación de los beneficiarios económicos.
A partir de 2011, jurisdicciones como Islas Vírgenes Británicas (BVI) y luego Panamá, en 2015, implementaron políticas de Debida Diligencia que facilitaban la detección del beneficiario económico, lo que cambió la forma en que las personas estructuraban sus patrimonios a través de compañías.
Hoy, los clientes buscan crear estructuras mucho más simples donde puedan realizar una planificación sucesoria que les ayude a evitar las largas y costosas sucesiones en los diferentes países donde tengan diversificados sus activos.
Las estructuras más simples en temas de planificación sucesoria son compañías de jurisdicciones que practiquen el Common Law, donde se pueden emitir acciones de tenencia conjunta con derecho de supervivencia y, por otro lado, las compañías de BVI con estatutos especiales con dos tipos de acciones (en adelante "Sociedades con Acciones Clase A y Clase B"), las cuales explicaremos con mayor detalle.
No dejes de leer: Due diligence: La regulación de las Islas Vírgenes Británicas en materia de cumplimiento
Tenencia Conjunta con Derecho de Supervivencia
La jurisprudencia del Common Law permite la figura de tenencia conjunta con derecho de supervivencia lo cual se refiere a una forma de propiedad donde dos o más personas poseen una propiedad conjuntamente y, si uno de los propietarios fallece, su parte de la propiedad se transfiere automáticamente a los otros propietarios, en lugar de pasar a los herederos del fallecido.
Si bien esta forma de emitir las acciones se puede incorporar en cualquier compañía de las jurisdicciones antes mencionadas, presenta como característica principal que, al fallecimiento de cualquiera de los accionistas dentro del certificado de acciones, en vez de que su participación accionaria pase a sus herederos, la misma pasa al resto de los accionistas, lo cual es un reto importante.
Te recomendamos leer: Además de la consulta popular de Noboa, ¿qué otros cambios marcan el nuevo rumbo del arbitraje en Ecuador?
● ¿Cuándo se recomienda?
El uso de esta manera de emitir las acciones se recomienda cuando hay plena confianza en la familia y/o la familia cuenta únicamente con dos generaciones, es decir, padre, madre e hijos.
● ¿Cuándo no se recomienda?
No recomendamos que se utilice este método de sucesión automática cuando existe desconfianza dentro de la familia o la familia cuenta con más de dos generaciones, es decir, padre, madre, hijos y nietos.
En el caso antes presentado, recomendamos utilizar estructuras más robustas como las Sociedades con Acciones Clase A y Clase B que desarrollaremos más adelante.
Sociedades con Acciones Clase A y Clase B
Las Sociedades con Acciones Clase A y Clase B para temas sucesorios son vehículos que se incorporan únicamente en la jurisdicción de BVI debido a que es la única que contempla la redención sin consideración.
Para poder emitir Acciones Clase A y Clase B, se debe haber incorporado la sociedad con el Memorandum & Articles of Association especial. Luego de incorporada la sociedad, es posible enmendar este Memorandum & Articles of Association.
Te puede interesar: Recuperación Tributaria en Panamá: ¿Cómo aprovechar las Medidas Transitorias de la Ley 401?
¿Qué dice la Ley?
La Ley de Compañías Internacionales de Negocios de BVI de 2004 en su artículo 57(1A)indica que las acciones se pueden redimir sin consideración. Es decir que las acciones se pueden entregar a tesorería o cancelarse sin una contraprestación. La ley también indica que las acciones se pueden redimir automáticamente cuando ocurra algún suceso mencionado en el Memorandum & Articles of Association.
¿Qué dice el M&AA?
Accionista Clase A
- El accionista Clase A tiene todos los derechos de la compañía, es decir, voz, voto, derecho a recibir dividendo y distribuciones.
- Al fallecimiento o incapacidad del accionista Clase A, las acciones se redimen automáticamente, sin consideración y se cancelan.
Accionista Clase B
- El accionista Clase B no tiene ningún derecho dentro de la compañía mientras exista un accionista Clase A.
- Al no haber más accionistas Clase A, los accionistas Clase B pasan a tener todos los derechos que tenían los Accionistas Clase A, es decir, voz, voto, derecho a recibir dividendo y distribuciones.
Imperdible: El segundo mandato de Bukele a través de los números
¿Qué Problemas identificamos que tiene esta estructura?
Si fallece un accionista Clase B, habría que hacer un juicio de sucesión.
Como hemos podido observar, existen dos maneras sencillas de sucesión automática: directamente a través del uso de un vehículo sin necesidad de constituir otra estructura o incorporar a terceros fiduciarios. Ahora bien, ambas estructuras tienen sus riesgos y si las mezclamos podemos mitigar los mismos de la siguiente manera:
Se incorpora una sociedad con acciones Clase A & acciones Clase B. Las acciones Clase A se pueden emitir de manera conjunta o separadas (si cada uno tiene el 50 % de las acciones no hace diferencia). En cuanto a las acciones Clase B, se emiten a cada uno de los hijos en tenencia conjunta con derecho de supervivencia con los accionistas Clase A. Es decir, si un accionista Clase B fallece antes que los accionistas Clase A, los accionistas Clase A podrán transferir las acciones del Accionista Clase B fallecido a los herederos del Accionista Clase B o si así lo desean, al resto de los accionistas Clase B.
* Domingo Díaz de la Guardia es asociado de Icaza, González-Ruiz & Alemán desde el 2014. Actualmente, se encarga de las operaciones de constitución de sociedades en la firma.
Te lo contamos: CTA: ¿Cuáles son las normas de transparencia que deben cumplir las empresas en EE.UU. a partir de 2024?
Add new comment