En 2023 la industria automotriz en Brasil finalizó el año con resultados que superaron las expectativas. Los cambios positivos para el mercado brasileño quedaron reflejados en el último informe de la Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos a Motor (Anfavea), lanzado en octubre.
El desempeño más favorable del sector automotriz este año se atribuye en gran medida a la influencia del programa de descuentos, promovido por el Gobierno Federal, para la compra de vehículos por valor de hasta 24.344,8 dólares (120.000 reales).
Según el balance del Ministerio de Desarrollo, Industria, Comercio y Servicios (MDIC), se vendieron 125 mil automóviles, con descuentos que oscilaron entre 405,7 dólares (2.000 reales) y los 1.623 dólares (8.000 reales), lo que representó un aumento del 1,7 % al 11,7 %.
Anfavea también informó que, gracias a este Programa, las ventas (matriculaciones) crecieron un 9,4 % de enero a agosto, sumando 1.432 millones de automóviles, respecto del mismo período de 2022.
Sin embargo, es importante mencionar que parte de estas ventas incluye automóviles en existencia. Durante el mismo período, la producción cayó ligeramente un 0,4 %, hasta alcanzar 1.542 millones de unidades, mientras que las exportaciones disminuyeron un 12,8 %.
Asimismo, la Federación Nacional de Distribución de Vehículos Automotores (Fenabrave), que representa a los concesionarios de autos, presentó al cierre de 2023 resultados más positivos de lo previsto inicialmente: la nueva proyección de ventas apunta a un crecimiento del 5,6 % que, de confirmarse, equivaldría a 2,22 millones de unidades, entre autos de turismo, utilitarios ligeros, camiones y autobuses.
En cambio, la previsión anterior, formulada en enero, señalaba un mercado estancado, con crecimiento nulo, con un total de 2,1 millones de vehículos.
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Las perspectivas para el sector en 2024 siguen siendo optimistas, comparadas con los resultados observados durante la pandemia y en los años posteriores. Se cree que los cambios en el escenario macroeconómico del país estimularán las actividades en el sector automotriz después de un período turbulento.
En cuanto a la crisis mundial de suministro de semiconductores, aunque persiste a menor escala, se espera que la situación finalmente se regularice en 2024 y sus impactos sean cada vez menos sentidos por la industria.
Para Márcio de Lima Leite, presidente de Anfavea, las obras del Nuevo Programa de Aceleración del Crecimiento (Nuevo PAC), lanzado en agosto pasado por el Gobierno Federal y que prevé una masiva inversión de 1,7 billones de reales en infraestructura, jugarán un papel fundamental en apalancar la economía y estimular las ventas de maquinaria vial, que sufrieron una caída del 14,8 % en el primer semestre de este año.
Se espera que la estimación de crecimiento del sector automotriz en 2024 se caracterice por un aumento de las importaciones a expensas de la producción nacional, especialmente debido a la importante entrada de nuevos fabricantes de automóviles asiáticos al mercado nacional.
Otro indicio del optimismo del mercado y de las entidades del sector para el próximo año es la iniciativa de Anfavea de revitalizar el reconocido evento Salón del Automóvil de São Paulo (posiblemente con un nuevo nombre), que no se realiza desde 2018.
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A pesar de los problemas de infraestructura que enfrenta el país, la mayoría de las automotrices deben mantenerse firmes con el propósito de electrificar sus flotas, incluyendo inversiones en nuevas tecnologías, lo que tiende a intensificar la adopción de modelos eléctricos por parte de los consumidores. En un intento de romper la barrera de los altos precios para este tipo de vehículos, proyectos de incentivos fiscales y la concesión de líneas de crédito por parte del BNDES para la adquisición de máquinas y vehículos de empresas y para la investigación y producción de automóviles eléctricos en el territorio nacional refuerzan lo que se esperaba un calentamiento del sector.
Debido a la alta carga fiscal del país, la inflación y los impactos de la crisis global en la producción de vehículos que han resultado en aumentos significativos en los precios de los automóviles, es probable que los fabricantes de automóviles continúen adoptando estrategias de ventas alternativas con sus redes de concesionarios.
Entre estas alternativas destaca el crecimiento de las campañas de venta directa con descuentos, tradicionalmente dirigidas únicamente a empresas de alquiler, propietarios de flotas, taxistas, gobiernos y personas con discapacidad.
También cabe destacar la creación de sofisticadas plataformas de venta en línea adoptadas por todo el sector, a raíz del nuevo perfil del mercado de consumo, debidamente acomodado en convivencia con la Ley Renato Ferrari (Ley nº 6.729/1979) que regula las relaciones comerciales mantenidas entre los fabricantes de automóviles y sus respectivas redes de concesionarios de vehículos.
En conclusión, el escenario proyectado para el sector automotriz en 2024 está marcado por perspectivas positivas. La expectativa es que los nuevos programas de inversión, el aumento en la concesión de líneas de crédito, la flexibilización de la crisis de los semiconductores y las inversiones en infraestructura impulsen las ventas, contribuyendo a una recuperación más robusta del mercado.
La transición hacia la electrificación de flotas y el énfasis en estrategias de venta directa y online demuestran la capacidad de las empresas para adaptarse a las demandas del mercado y a las tendencias tecnológicas, sumado al desafío de la convivencia con las normas legales vigentes desde finales de los años 70, en particular la Ley Renato Ferrari, incidentes en la relación comercial entre los fabricantes de automóviles y sus redes de concesionarios.
*Tatiana Dratovsky Sister es socia y Priscila Prado Faloppa es abogada del área de contratos comerciales y franquicias de BMA Advogados.
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