11/09/2024
Después de madurar la idea por unos cinco años, el despacho internacional Greenberg Traurig llegó a Brasil, específicamente São Paulo, la ciudad más grande del país y centro económico y financiero.
La oficina estará a cargo de Antonio Peña, quien codirige la práctica latinoamericana del bufete, y los socios Yosbel Ibarra y Arnaldo Rego, los tres asentados en Miami y quienes compartirán su tiempo entre ambas jurisdicciones.
La intención de la firma con esta apuesta estratégica es acercarse aún más a sus clientes en ese país y facilitar el trabajo que realizan en conjunto desde hace muchos años, además de atender una demanda creciente de servicios legales.
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Con licencia para ejercer en el estado de Florida y México y parte de la firma desde 2006, Peña atiende a clientes en operaciones de fusiones y adquisiciones, sociedades de adquisición de propósito especial (SPAC, por sus siglas en inglés), mercados de capitales, capital de riesgo y tecnologías emergentes y gobierno corporativo.
Ibarra se especializa en transacciones corporativas internacionales, financiamientos transfronterizos, energía e infraestructura, además de gobernanza y otros asuntos corporativos. Se unió a Greenberg Traurig hace 20 años.
Rego, quien se unió al estudio en 2019, atiende a clientes extranjeros en adquisiciones y transacciones en EE. UU. y a clientes estadounidenses en adquisiciones en el extranjero. Además, asiste a empresas tecnológicas emergentes, en etapa inicial y consolidadas, en asuntos como blockchain, criptovalores y criptomonedas. Cuenta con experiencia previa en São Paulo, adquirida en firmas internacionales donde trabajó anteriormente.
Otros despachos internacionales han puesto su mirada en el mercado brasileño. Es el caso de DLA Piper que, este año, inició operaciones en São Paulo. El despacho trabaja desde hace varios en el mercado brasileño en alianza con Campos Mello Advogados.
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